La Fundación Amancio Ortega donará 6,7 millones a la sanidad pública asturiana para la adquisición de nuevos equipos oncológicos que permitirán "reforzar el arsenal tecnológico" del Principado para "combatir el cáncer", según destacó ayer el presidente autonómico, Javier Fernández. Esta donación se enmarca en el proyecto por el que la Fundación destina 320 millones a renovar aparatos de diagnóstico y tratamiento oncológico en todas las comunidades.

Fernández y el vicepresidente ejecutivo de la Fundación Amancio Ortega, José Arnáu, firmaron ayer el Protocolo de Intenciones para la donación de los importes correspondientes a los costes de adquisición de los aparatos. En concreto, está previsto la adquisición de un acelerador lineal (3,8 millones) para el Hospital Universitario Central de Asturias, lo que permitirá que la comunidad cuente con seis aparatos de estas características , y, según señaló Fernández, "acabar por completo con las demoras que aún se producen, aumentar la cartera de servicios, evitar derivaciones a otras autonomías e incrementar el número de sesiones anuales". También se comprará una resonancia magnética, que será la quinta en el HUCA, de tres teslas (1,6 millones) y una maquina intrabeam (695.000 euros), que permitirá simultanear las labores de cirugía con las de radioterapia, por lo que los pacientes podrán recibir durante una operación la irradiación pertinente.

El presidente subrayó que Asturias cuenta con la "ventaja" de disponer de las infraestructuras necesarias para acoger estos equipos y de "unos profesionales con la formación necesaria para sacar el máximo rendimiento a la nueva tecnología de forma inmediata".

Además, se comprarán cuatro mamógrafos (850.000 euros) que irán destinados a los hospitales de Valle del Nalón (Langreo), Jarrio (Coaña), San Agustín (Avilés) y Cabueñes (Gijón), según informaron desde el Gobierno asturiano.