La Xunta participa, junto a otros cinco países europeos, en un proyecto que busca prevenir la violencia sexual y el acoso entre mujeres inmigrantes a través de cursos de formación e información. La iniciativa, que tiene por nombre Traza una línea y en la que, además de Galicia, participan Austria, Bulgaria, Polonia, Reino Unido y Grecia, celebró la semana pasada la segunda de sus reuniones en la capital búlgara, Sofía.

El objetivo final de este proyecto, que se inició en octubre de 2016, es apoyar a las mujeres inmigrantes de cada uno de los países socios para superar los prejuicios basados en el género. En el caso de Galicia, se está formando a algunas de estas mujeres para que colaboren y ayuden a combatir la violencia machista. Para conseguirlo, se trabaja con ellas para convertirlas en líderes de sus comunidades y para que ejerzan así como agentes multiplicadores en la sensibilización sobre el acoso sexual y la violencia.