-¿Percibe cambios en las preocupaciones expuestas por la juventud en la última década?

-Están repuntando las preguntas sobre imagen corporal y autoestima, observamos que la edad de inicio en comportamientos tendientes o de quienes ya cuentan con un trastorno alimenticio es más baja que hace diez años. Con todo, la mayor parte de las consultas están vinculadas a la sexualidad y a la afectividad. Lo curioso es que se mantienen preguntas desde el 2006 hasta hoy. Muchos mitos siguen circulando a pesar de que hay más información y acceso a internet.

-¿Por ejemplo?

-Se sigue creyendo que en la primera relación sexual no se puede producir un embarazo, que la marcha atrás es una alternativa segura, que la orientación sexual es deducible por actitudes o cuestiones externas como la gestualidad o el modo de caminar...

-¿En qué áreas existe mayor desconocimiento por parte de los jóvenes?

-Los adolescentes no saben cómo son sus cuerpos ni cómo funcionan, por lo que no entienden qué es ni por qué se produce la respuesta sexual. Además, siguen orientando sus prácticas a partir de lo que los medios de comunicación y el cine difunden como modelo erótico. La pervivencia de ese patrón, construido desde una visión heterosexual, explica que los problemas y dificultades que nos plantean, muchas veces relacionados con frustraciones derivadas de no encajar en ese molde uniforme, no varíen mucho.