Más de 1,8 millones de sursudaneses han buscado refugio en los países vecinos como consecuencia del conflicto que estalló en diciembre de 2013 en el país más nuevo del mundo, de los que los niños representan el 62 por ciento, según denunció ayer el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef) y el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur). Según destacaron, en el interior de Sudán del Sur, más de 1.000 niños fueron asesinados o heridos desde que comenzó el conflicto, mientras que alrededor de 1,4 millones de menores han sido desplazados internamente. Además, cerca de tres cuartas partes de los niños y niñas del país no van a la escuela.