El 37,9% de los adolescentes de 12 a 18 años "tontea" con las drogas "y ya tiene un patrón medianamente de riesgo". Entre las chicas, más: el 40,3% tiene "un riesgo constatable de poder llegar a tener problemas con las drogas", frente al 35,7% de los chicos, lo que apunta la "necesidad de aplicar una perspectiva de género para mejorar la prevención". Además, la edad multiplica la exposición al peligro: mientras entre los que cursan 1º y 2º de ESO el consumo de riesgo se presenta en solo uno de cada diez, en 3º y 4º sube ya al 31,9% y al llegar al Bachillerato alcanza el 61,2%.

Estos datos de consumo de riesgo, medido con un test que se utiliza para las drogas en general (incluido el alcohol), los presentó ayer Antonio Rial Boubeta, profesor de la Universidade de Santiago y coordinador de varios estudios sobre el consumo de drogas y el uso de internet entre adolescentes, primero de ámbito autonómico y después en las provincias de A Coruña y Pontevedra. En este caso, la encuesta se realizó entre casi 2.400 alumnos de ESO y Bachillerato de Santiago, y aunque los resultados no son extrapolables a Galicia, dice, como en los anteriores análisis financiados también por el Plan Nacional sobre Drogas, el investigador los ve "un buen indicador" de las tendencias en el consumo de sustancias adictivas en la comunidad.

Y lo que dicen esas tendencias es que el inicio en el consumo se produce a "edades cada vez más tempranas", explica Rial Boubeta, que se detecta "un repunte" en el consumo (aunque aún por debajo del conjunto del Estado) y que se produce un "aumento considerable" de los consumos considerados de riesgo. En los tests que miden en concreto la posibilidad de desarrollar una "adicción importante" al cannabis da positivo el 7,5% de los jóvenes (12,1% en Bachillerato), mientras que los bebedores de riesgo llegan al 30,1%. "No quiere decir que sean alcohólicos, pero el riesgo de que puedan llegar a serlo es medianamente alto", explicó Rial Boubeta en el Concello de Santiago, que usará el estudio para revisar "a fondo" el plan municipal de drogodependencias. En 2016, los datos de riesgo del estudio en A Coruña y Pontevedra (hasta los 17 años) eran de un 3,5% (la mitad que ahora) en el cannabis y de un 22,8% en el del alcohol (8 puntos menos).

El investigador también hace notar la incorporación "preocupante" de las chicas a estos "patrones peligrosos de consumo": superan a los hombres, menos en el cannabis. También manifiestan un mayor porcentaje de uso problemático de internet (19,9% frente a 14,6%).

En relación al uso de la red, al analizar las prácticas de riesgo de los jóvenes, son sobre todo ellas quienes envían fotos o vídeos personales de contenido erótico o sexual (12,2% frente a 8,7%) y también son las más coaccionadas para hacerlo (13,8% frente a 3,2%). El estudio constata además un aumento del ciberacoso (en torno a un 15%). Además, permite constatar que el 10,1% de los adolescentes apostaron dinero en juegos de azar.