Al menos 2.515 menores tutelados en residencias en España han cumplido o cumplirán los 18 años a lo largo de 2017 y tendrán que dejar su plaza libre. Aunque gracias a la Ley de Infancia aprobada en 2015 estos jóvenes en situación de vulnerabilidad seguirán contando con recursos de las administraciones hasta los 21 años y, en el caso de Galicia, hasta los 25 años, la mayoría de edad supone que pasen, de un día para otro, a la vida adulta, once años antes que la media de los jóvenes españoles, según datos de Eurostat.