Casi un millar de gallegos podrán tratarse con nuevos fármacos de hepatitis C, a raíz de que se universalicen para todos los afectados, según estimaciones del recientemente nombrado presidente del Grupo de Estudio de las Hepatitis Víricas (Gehep), Luis Morano. El experto cifra entre un 20 y un 25% de los casos diagnosticados, que están en estados iniciales de la enfermedad, lo que equivaldría a unos 800 a 1.000 pacientes potenciales en Galicia.

El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaron ampliar el Plan Nacional de la Hepatitis C hasta el año 2020 con el objetivo de tratar a todos los pacientes con los fármacos de última generación -libres de interferón-, que solo se habían utilizado para los casos de más gravedad. La administración de Sovaldi despertó una gran demanda social. Y la eficacia de curación de esos nuevos fármacos ha quedado avalada. Es decir, el tratamiento de la hepatitis C con antivirales de acción directa se extiende a los pacientes con grado de fibrosis más bajo (F0 y F1). Así lo acordaron en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), aunque no se ha abordado el tema de la financiación.

"En 2020 podremos haber tratado a todos los pacientes con una enfermedad que hasta hace poco no tenía curación" y es mortal, destacó el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, en el transcurso del pleno del Consejo que se celebró ayer en Madrid.

El titular gallego de Sanidade ha avanzado que el plan aprobado hace dos años ha demostrado ser "exitoso" ya que "ha permitido curar a muchos pacientes" y de ahí la necesidad de ampliarlo a los pacientes "de menor gravedad". En el caso de Galicia, Vázquez Almuiña concretó que más de 5.000 pacientes con un estadio más avanzado de la enfermedad ya fueron tratados y más de 300 con las fibrosis que ahora se incluyen (F0 y F1) gracias a algunas excepciones que ya incluía el plan.

Las causas de excepcionalidad a las que aludía ayer el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez y por las que ya se trató a 300 pacientes en fase inicial de la enfermedad en Galicia -que ya aparecían consignadas en el Plan Estratégico- son: mujeres en edad fértil y que manifestaron su deseo de embarazo; personas trasplantadas de hígado; pacientes con conductas de alto riesgo y, por tanto, con alto riesgo de transmisión; profesionales sanitarios que hubieran adquirido el virus en el ejercicio de su profesión y con alteraciones extrahepáticas.

Es decir, sobre financiación, Vázquez ha reconocido que los nuevos tratamientos que están apareciendo para esta y otras enfermedades hacen necesario analizar cómo se incorporan a la sanidad pública sin que "dispare" el gasto sanitario, pero ha rechazado crear fondos específicos para pagar los fármacos de una enfermedad concreta. "Se debe hablar de financiación en su conjunto", insistió.

La ministra de Sanidad, Dolors Montserrat recordó que estos fármacos consiguen curar el virus en más del 90% de los casos y que han sido administrados en más de 67.000 pacientes en España.

La Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas, que integra a siete asociaciones médicas y de pacientes nacionales, afirma que es "un gran paso adelante". No obstante, lamentan que no se haya producido en el terreno del cribado a poblaciones de riesgo", ya que se estima que el infradiagnóstico de la hepatitis c alcanza a entre el 35 y 50% de los pacientes infectados. "Para la eliminación de la hepatitis C necesitamos también sacar a la luz el VHC oculto", según el coordinador, García-Samaniego.

La Plataforma Nacional de Afectados por la Hepatitis C exigió ante el Ministerio que el Gobierno negocie con las farmacéuticas una bajada "drástica" de los precios del tratamiento de la hepatitis C.