Una peluquería mixta será el escenario de La Pelu, la nueva comedia de situación que estrenará RTVE el próximo lunes 3 de julio a las 22.10 horas en La 1 con Chiqui Fernández, Anna Gras y Juanjo Cucalón como protagonistas de una trama que "ofrecerá una diversión muy refrescante" para todos los públicos.
La Pelu, que se enmarca dentro del género short comedy, se emitirá en capítulos cortos con bloques de 25 minutos, en los que se reflejará el día a día de una peluquería mixta, un lugar en el que conviven los trabajadores, los clientes y los vecinos del barrio.
Preestrenada el pasado mes de mayo en el Festival de Cine y Televisión de León, la serie ofrecerá humor para todos los públicos y cuenta con "un decorado único, grandes actores y un estupendo guión", según señala en un comunicado del ente el director de Cine y Ficción de TVE, Fernando López Puig.
A un reparto encabezado por los actores Chiqui Fernández, Juanjo Cucalón y Anna Gras se suman los nombres de Bárbara Maestanza, Adam Jeziersky y Fernando Gil, entre otros, que también formarán parte de una comedia que ha sido grabada en el centro de producción de RTVE en Sant Cugat del Vallès (Barcelona).
En ella, Pepe (Cucalón) acaba de prejubilarse en el banco en el que trabajaba, con el deseo de invertir el dinero recibido en un apartamento en la costa y en una embarcación. Un sueño que se va al traste cuando su mujer, Nati (Fernández), decide comprar un local y montar su propia peluquería.
Por otra parte, TVE negó ayer que se haya producido ningún tipo de "amenaza o represalia" contra la periodista Susana Torres quien, explica la Corporación, tenía un contrato de interinidad vinculado al corresponsal de Berlín que se ha extinguido de manera automática cuando éste ha regresado a Madrid.
La subdirectora de informativos de RTVE, Carmen Sastre, niega, según indicaron ayer fuentes de la Corporación, "que hayan existido amenazas ni que hayan existido represalias" contra Torres y añade que "la salida de la periodista no se puede considerar ni tan siquiera un despido".
Se trata, añade, de una interina que estaba sustituyendo al corresponsal en Berlín, Miguel Ángel García, por lo que su contrato estaba vinculado a ese nombramiento y "decae" de forma automática con el regreso de este trabajador a su puesto laboral.
