-Seis de cada diez jóvenes no hablan por teléfono, entendiendo la frase en sentido literal.

-Está clarísimo que a las generaciones más jóvenes no les gusta hablar por teléfono de forma directa y de hecho, no lo usan. Las empresas de telefonía que han entendido mejor esto, han subido las ofertas en las tarifas de datos, mientras que no prestan prácticamente atención a las llamadas de voz. Y cada vez hay más personas que indican que no les gusta hablar por teléfono.

- También resulta destacable que los adultos de entre 55 y 65 años estén utilizando tanto las llamadas telefónicas a través de apps .

-WhastApp ha sido un fenómeno muy importante en español y el nivel de adopción es brutal. Hay quien hizo grupos con amigos de la infancia y combate la soledad, o los usa para compartir noticias. Entre llamar a una persona a la que molestas porque obligas a prestar atención en ese momento y hacerlo por WhastApp, que permite no contestar o hacerlo dentro de un rato, revisar el check... La gente tiende a elegir algo que ofrece más grados de libertad al que está al otro lado.

-¿Se perciben como invasivas?

-Sí. Los jóvenes no llaman por teléfono a no ser que se produzca una urgencia. Y ni eso. Es un cambio de hábitos, que se acentúa a medida que las aplicaciones van ofreciendo mejores prestaciones.

- Es imparable. En vez de número de teléfono, una firma aérea ya ofrece comunicarse por chat .

-El gran impacto va a ser sobre el servicio cliente: cualquier empresa sabe que hoy llamar al cliente resulta molesto y es mal recibido. A través de mensajería instantánea aún se puede plantear.

-¿Se perderá el cara a cara?

-No pienso que haya una pérdida, porque hay aplicaciones que sí lo permiten. House Party está subiendo muchísimo. Es un fenómeno que en muy poco tiempo ha crecido en usuarios, básicamente de la "generación Z" y hay quien cree que será la próxima compra de Facebook. No es más que un vídeo chat que permite hablar hasta con diez personas en tiempo real.