Durante su etapa en Pontevedra, puso en marcha la inmunoterapia oral (ITO), técnica que el doctor Manuel Fontán, miembro de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap), defiende al considerar que el hecho de que el niño pueda desarrollar tolerancia al alimento al que tiene alergia es una seguridad para las familias y para el propio paciente, ya que disminuye de forma considerable la posibilidad de reacciones severas al haberse establecido tolerancia.

-¿Qué ventajas tiene la inmunoterapia oral frente a la otra opción, que es suprimir el alimento?

-La inmunoterapia oral es una técnica médica que ayuda muchísimo a las familias porque el hecho de que un niño que no toma leche la pueda tomar con un nivel de seguridad alto ya es una gran ventaja. Hasta los cinco o seis años, se puede controlar lo que come el niño, pero cuando comienza el colegio puede haber problemas serios porque para alguien que es alérgico, y en contra de lo que dice el sentido común, pequeñas cantidades pueden ser mucho más peligrosas que grandes cantidades. Si el niño alérgico al huevo come una croqueta con el tenedor de otro niño que ha comido huevo puede tener una reacción alérgica muy severa.

-¿Qué resultados tiene esta técnica?

-La inmunoterapia está en continuo estudio, comparando resultados con otros países y otros grupos y se sigue investigando para mejorar la técnica. Y hay que decir que España es líder en investigación de alergias alimentarias. Cuando nosotros la pusimos en marcha en Pontevedra, hace unos doce años, los resultados que obtuvimos fueron muy buenos, aunque no llegaron a publicarse porque el grupo de pacientes era muy reducido. Y hoy, con lo que ha avanzado y con lo que sabemos sobre esta técnica, probablemente serían aún mejores.

-¿Y de adulto no será alérgico?

-Una vez que tolera el alimento, lo normal es que lo tolere para siempre. Pero si una persona deja de tomar el alimento durante un tiempo, posiblemente podría tener una reacción si vuelve a tomarlo. Por eso se recomienda que no dejen nunca de estar en contacto con el alimento, porque cuando se interrumpe la administración se puede perder la tolerancia que el sistema inmune ha establecido.

-¿Por qué desarrolla un niño alergia al alimento?

-De la misma forma que la desarrollan a cualquier otro alérgeno como ácaros, polvo... Tenemos una predisposición genética a padecer enfermedades alérgicas y luego están la exposición ambiental. No hay una causa claramente definida, pero la opinión de los expertos va en dirección a cambios en el estilo de vida y en el patrón de exposición a agentes infecciosos. Lo cierto es que la prevalencia de las enfermedades alérgicas ha aumentado de forma exponencial, tanto que en los últimos diez años casi se ha duplicado.