Las nanopartículas de oro, insertadas en microcápsulas de resina, podrían aumentar la eficacia de los tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia, al poder actuar in situ desde el interior de los tumores, reduciendo los habituales efectos secundarios en los tejidos sanos. Así se desprende de los resultados de un estudio del Instituto de Nanociencia de Aragón.