Los grandes festivales, como Resurrection Fest o Portamérica, han tirado de la cultura en 2016, según el informe anual de la Fundación SGAE, que revela una tímida mejoría del sector musical y de otros culturales tanto en Galicia como en el resto de España.

La presidenta de la fundación, Inés París, resume en el texto la situación cultural: "Tras el cambio de tendencia en 2014, cuando, por fin, la mayor parte de los datos dejaron de ofrecer descensos, nos encontramos en el año 2015 con una situación de estancamiento, los indicadores no mostraban descensos, pero tampoco aumentos significativos. Pues bien, una situación muy similar es la que hallamos con los datos correspondientes a 2016".

Tanto el número de conciertos como el de asistentes menguan de 2015 a 2016 si no se tienen en cuenta los grandes festivales. En Galicia más de un millón de personas asistieron a ver música en directo, una cifra muy similar a la de años anteriores. El 80,4% de los conciertos que se celebraron fueron de estilo pop rock. La recaudación también aumentó: alcanzó los 11.170.000 euros, casi 2.300.000 euros más que el año anterior.

La SGAE señala en el informe que "hay que apoyar los festivales, pero también las pequeñas salas, que son la joya de la corona de la música en directo".

No ha seguido la misma suerte la música clásica, que ofreció menos conciertos: de 7,9% sobre el total a nivel nacional a 7,7%. Sin embargo, la SGAE destaca que Galicia es una de las comunidades con una programación por encima de la media, más de 0,32 por cada 1.000 habitantes. Su número de espectadores se mantiene estable respecto al 2015, con 260.000, y mejora en recaudación con un aumento de 172.000 euros.

Más cines en A Coruña

En el sector del cine, Pontevedra no deja de perder pantallas: la provincia pasó de tener 62 en 2014 a 56 en 2016, mientras el resto de provincias se mantiene o mejora, como A Coruña que sumó tres cines y ocho pantallas.

El gasto medio en España en este sector se fijó en 13,1 euros, muy lejos de los 8,9 que invierten los gallegos y que convierten a la comunidad en la cuarta que menos gasta en este aspecto. El dato supone tres décimas más que el año anterior. Hay que tener en cuenta las diferencias en el precio de las entradas de unas comunidades autónomas a otras: en Madrid, por ejemplo, el gasto se eleva hasta 20,4 euros y el precio de la entrada es de 8,64 euros; en Galicia apenas supera los 7.

Las películas infantiles fortalecen la taquilla gallega y se cuelan entre las más vistas, aunque en el número uno se posicionó Un monstruo viene a verme.

Las artes escénicas continúan con la tónica del año 2015, tanto en número de representaciones como de espectadores y recaudación. Galicia sumó 21 espectáculos más (total 1.635), una cifra igual a la de Castilla La Mancha y por detrás de Madrid y País Vasco.

Los ingresos llevan una tímida evolución desde 2013 y el año pasado rozaron los 4.500.000 euros, esto supone el 2% frente a la recaudación total del sector en España. Los espectadores fueron 446.128. Ante estos datos, la SGAE se muestra esperanzada, pero recuerda que "todavía queda mucho por recorrer para alcanzar cifras similares a las correspondientes a 2007 o 2008".