El Gobierno gallego ha dado luz verde al decreto de tiempos máximos de espera, que garantiza que las operaciones en más de 100 patologías graves pero no urgentes en la comunidad --sobre todo en el caso de cáncer y determinadas enfermedades cardíacas y vasculares-- tendrán un tope de espera de 60 días.

Si no se cumple este plazo, tal y como se avanzó cuando se impulsó la ley de garantías de prestaciones sanitarias (aprobada en diciembre de 2013), el paciente tendrá derecho a cambiarse de centro o a optar por un hospital concertado acreditado por el Servizo Galego de Saúde (Sergas), que asumirá el coste de la intervención quirúrgica.

En el caso de las consultas externas y de las pruebas diagnósticas se mantiene también el plazo de 45 días que se había comprometido cuando se impulsó la ley, que ahora se ha desarrollado a través de decretos.

La Xunta calcula que entre 15.000 y 20.000 personas podrán beneficiarse cada año de este sistema de garantías de tiempos máximos.

Lo ha ratificado al término de la reunión semanal del Ejecutivo gallego el presidente, Alberto Núñez Feijóo, quien ha detallado junto con el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, el contenido de este decreto "complejo y difícil".

Admbos dirigentes han subrayado que la intención de la Xunta es "seguir ampliándolo" e ir incorporando nuevas patologías. "La lista de espera es algo que nos gustaría ir abordando y es lo que se está haciendo; estamos en el quinto lugar dentro de la sanidad española, pero queremos mejorar", ha remarcado

Enfermedades y efecto para quienes ya están en espera

El decreto selecciona patologías oncológicas malignas, vavulopatías, patologías vasculares arteriales, patologías cerebrales benignas y patologías oftalmológicas.

En lo que respecta a las enfermedades oncológicas, el texto hace referencia tanto al ámbito de las cirugías, que incluyen neoplasias, tumores neuroendocrinos y carcinomas, como a las primeras consultas y pruebas diagnósticas y terapéuticas recogidas en las vías rápidas establecidas para distintos tipos de cáncer.

Entrará en vigor a los dos meses de su publicación en el Diario Oficial de Galicia y será de aplicación para las personas que, dentro de estas casuísticas, estén ya en las listas de espera del Sergas y para los nuevos procesos de enfermedad.

Otros decretos

Antes de este decreto, otras normas han desarrollado la ley aprobada años atrás para garantizar los derechos de libre elección de profesionales y centros sanitarios; disponer de una segunda opinión médica; y dejar por escrito las instrucciones previas.

Feijóo ha concretado que, desde 2014, en Galicia pidieron cambio de profesionales sanitarios o de centro de salud/hospital más de 220.000 personas; en torno a 1.000 pacientes demandaron una segunda opinión; y hay un registro de instrucciones previas con 6.750 notificaciones.

Rechaza "privatización"

Preguntado acerca de si la vía de ir a un centro concertado puede suponer una privatización encubierta, el conselleiro de Sanidade lo ha rechazado y ha apuntado que éste sería "el último mecanismo", además de señalar que entiende que "no tiene que ser necesario" acudir a él.

"Pero tenemos que cubrir cualquier casuística que se pueda dar; la autonomía del paciente es lo más importante, que el pueda decidir, con toda la información", ha aseverado Almuiña.

Trangorex

Por otra parte, preguntado por los problemas para encontrar Trangorex --un medicamento para tratar alteraciones del ritmo cardiaco-- en las farmacias, ha indicado que "hay alguna farmacéutica con problemas de producción". "Es algo que no ocurre en Galicia, hablamos de la Unión Europea y hay que tomar medidas entre todos", ha reflexionado.

Dicho esto, ha incidido en que este asunto "preocupa" a la Consellería y al Ministerio, pero ha matizado que el paciente "siempre queda cubierto" porque se revisan los casos con el fin de darle "siempre" alternativas a esta medicación.