El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, remarcó ayer que la Xunta seguirá adelante con la reforma de la Lei de Saúde a pesar de las movilizaciones que se han llevado a cabo contra esta medida, que suprime cuatro áreas sanitarias, ninguna de ellas en A Coruña.

No obsante, Vázquez Almuiña instó a los partidos políticos a que "hagan aportaciones" a un texto que, aseguró, trata de mejorar la situación actual, "nunca perjudicar". "Se tendrán en cuenta todas las propuestas", apuntó. El conselleiro aseveró que "no se cerrará ningún centro hospitalario en Galicia" y que "la intención del Gobierno es seguir invirtiendo para mejorar el servicio sanitario", dice.

La reforma de la Lei de Saúde, que reduce de 11 a 7 las áreas sanitarias, es uno de los frentes abiertos para Vázquez Alumiña en este inicio del curso político. Nunca una ley había recibido tantas alegaciones, más de 1.500, síntoma del rechazo que ha suscitado la norma que elimina las áreas de O Salnés, O Barco de Valdeorras, Monforte y Cervo.

Desde que se hizo público el anuncio de esta reforma de la normativa, ha habido varias concentraciones de sanitarios de las zonas afectadas y de otras en solidaridad para rechazar la eliminación de áreas sanitarias.