La llegada del otoño trae muchas sorpresas. No solo caen las hojas o es el momento de recoger castañas? también podemos disfrutar del delicioso sabor y propiedades nutritivas de las setas que cubren los suelos húmedos. Aprovecha la excusa para pasear por el bosque y conocerlas en su medio. No recomendamos recogerlas sin la ayuda de un experto para evitar intoxicaciones al consumirlas sin control. Lo más recomendable es comprarlas en centros especializados con sello de garantía y control sanitario.

Hay varias especies tóxicas que pueden ser confundidas fácilmente con las que no lo son por quienes carecen de los conocimientos necesarios. Os recomendamos que, antes de tocarlas o consumirlas, consultéis a un especialista o las llevéis a una asociación micológica. Los síntomas de una intoxicación son múltiples: gastroenteritis, náuseas, vómitos, diarreas, irritación por contacto, etc. o un cuadro mucho más grave por efecto de los tóxicos que contienen algunas especies (desde alucinaciones a intoxicación muscarínica, por ejemplo). Y no debes arriesgarte a consumirlas sin conocer exactamente lo que tienes entre manos.

De manera general, entre las comestibles más frecuentes podemos destacar Boletus, Agaricus, Níscalo, Lepiota, Pleorotus, etc. y, entre las venenosas, señalaríamos, entre otras, Amanita, Morchella y Tricholoma. Pero, aunque las mires en una guía o en cualquier página de internet, no es fácil diferenciarlas. Te recomendamos que acudas a tiendas especializadas donde encontrarás a la venta muchas variedades deliciosas que no serán peligrosas para tu salud. Para consumo habitual puedes recurrir a los elaborados (normalmente conservas) que encuentras en los centros de alimentación durante todo el año (como los champiñones, por ejemplo).

A nivel nutricional, las setas presentan un bajo contenido calórico y un elevado porcentaje de agua (superior al 80%). De su composición, podemos destacar:

-Ergosterol (sustancia precursora de la vitamina D). Su propiedad fundamental es que favorece la absorción de calcio y fósforo, minerales imprescindibles para el cuidado y mantenimiento saludable de nuestros huesos y dientes.

-Vitaminas del grupo B, fundamentalmente B2 (relacionada con la producción de anticuerpos y glóbulos rojos) y B3 (que participa en la síntesis de hormonas sexuales y glucógeno y juega un papel importante en el crecimiento).

-Minerales: yodo (fundamental para el tiroides), potasio (imprescindible para la transmisión del impulso nervioso y la actividad muscular y la reducción de la retención de líquidos), selenio (antioxidante que previene la destrucción de las células por los radicales libres) y fósforo (forma parte de la estructura de huesos y dientes).

-Fibra, de gran interés para combatir el estreñimiento.

Por su bajo aporte energético son un alimento ideal para las dietas de adelgazamiento, sobre todo si se preparan de manera sencilla y sin aporte de grasa innecesaria (no utilizar aceite en exceso para rehogarlas). Tampoco se debe abusar de su consumo, porque contienen quitina y resultan difíciles de digerir para algunos consumidores.

Las opciones de consumo son variadas y su versatilidad permite prepararlas casi como se te ocurra. Te proponemos:

-Pueden constituir un plato en sí mismas, salteadas con ajo, pimiento y aceite, evitando añadir alimentos que incrementen el contenido calórico del plato.

-En menestra. Puedes cocer otras verduras (judías, patata, zanahoria, guisantes, etc.), rehogar las setas con un poco de aceite de oliva y mezclarlas para comer.

-Como acompañamiento de otros platos, del tipo de la tortilla francesa, pescado a la plancha o filete de pollo.

-En revuelto. Es una opción sencilla de preparar y muy nutritiva. Puedes usar setas frescas o los champiñones enlatados a la venta en centros de alimentación. Primero rehogas estos alimentos y, en segundo lugar, añades el huevo batido y lo mezclas hasta alcanzar la textura deseada.

-En ensalada con gambas, gulas, etc. Puedes usar la imaginación y utilizar varios ingredientes para equilibrarla nutricionalmente. Como ejemplo: patatas cocidas, gambas cocidas, rábanos y setas frescas (que debes rehogar en la sartén). Lo mezclas y aliñas con aceite de oliva virgen, sal y orégano; obtendrás una ensalada templada que constituye una cena muy adecuada.

Los especialistas coinciden en que pueden ser consumidas por mujeres embarazadas, niños, adolescentes, ancianos, etc. sin que exista ninguna contraindicación específica salvo la dificultad de digerirlas, que mejora si utilizas productos elaborados para preparar los platos.

Cuidado especial se recomienda a quienes tienen elevado el ácido úrico, pues contienen purinas que se transforman en este ácido en el organismo. Si padeces hiperuricemia, gota o litiasis renal por sales de ácido úrico, su consumo debe ser controlado. Consulta a tu médico si resultan perjudiciales para ti.