Identificar parásitos autóctonos o biocidas que permitan erradicar las avispas asiáticas sin perjudicar a otras especies o el entorno natural así como estudiar el impacto socieconómico de esta especie invasora en la comunidad gallega y desarrollar un sistema que permita prever la expansión de estos insectos. Estos son los objetivos principales de una investigación de la Universidade de Santiago, financiada por la Deputación de A Coruña, y de la que ayer se presentaron los primeros resultados.

Julio Maside, uno de los investidaores, señaló que el estudio concluye que el productor es el que asume todo el coste de la lucha contra esta plaga y "de una forma no bien cuantificada". "Es decir, están cambiando las prácticas habituales de gestión de las colmenas y están asumiendo el combate sin contabilizar los gastos que eso supone", indicó. Asimismo, detalló que la investigación desarrolla un sistema basado en el análisis informático de diversos parámetros que determinan la densidad que va a tener la población de la avispa velutina en el futuro así como su distribución geográfica. "Las estimaciones de esos factores pueden predecir cuál va a ser el comportamiento de la especie en el año siguiente y esa es una herramienta totalmente esencial para la buena gestión de los recursos que se destinen a erradicarla", indicó.

A la hora de intentar reducir el número de avispas velutinas, la investigación, en la que la Deputación ha invertido 137.000 euros, incluye el análisis de parásitos autóctonos que permitan ralentizar o combatir la expansión de la velutina en Galicia. "Cuando hay una investigación, lo habitual es buscar patógenos en su lugar de origen y traerlos. Eso no lo queremos hacer, sería tener patógenos asiáticos que no habría forma de controlar y que se podrían expandir a otras especies y causar mucho más daño del que hace la propia velutina", señaló el investigador.

Pero además el estudio también contempla el análisis de biocidas que puedan ser utilizados de forma segura por los apicultores, que, conforme advierte el investigador, actualmente emplean productos que pueden ser perjudiciales tanto para ellos como para el medio ambiente "sin ser conscientes de su toxicidad".

En la presentación de estos datos, el presidente de la institución provincial, Valentín González Formoso, destacó el "liderazgo" de la Universidade de Santiago en el combate de un problema de "enorme envergadura" y que "tiene una dimensión europea". Hasta el momento, conforme señaló, cada afectado habilitaba para su erradicación "los recursos que se le ocurrían" sin que hubiese una "dirección facultada para establecer las líneas estratégicas básicas para el combate con seguridad". "Estamos muy preocupados pero esperanzados porque la ciencia gallega puede estar dando respuesta a un problema europeo", indicó.

Además, ha aprovechado para criticar que "las autoridades competentes" en la materia no hayan puesto en marcha medidas para paliar los daños que causa esta especie. Sólo en lo que va de año se retiraron ya 10.000 nidos.