Desmonta y permuta los colores como nadie, sus diseños hacen un poco más feliz a la gente, es la creadora nacional con más licencias en el extranjero, tiene tiendas propias en Europa y ahora suma a su cosmos el Premio Nacional de Diseño de Moda. Ella es su mejor marca: Ágatha Ruiz de la Prada. "Estoy muy feliz. Han sido muy monos al darme este premio, y este año lo agradezco especialmente, más que si me lo hubieran dado hace cinco años", señaló la diseñadora tras conocer la noticia.

El jurado ha premiado por unanimidad a la diseñadora "en reconocimiento a sus más de treinta años de trayectoria, por su capacidad de vincular su trabajo en moda con otras manifestaciones de las artes, el diseño o la industria". El galardón, que cada año otorga el Ministerio de Cultura, está dotado con 30.000 euros.

Presentó su primera colección en 1981, y cinco años después participó en su primer desfile de moda colectivo en París. Trabajadora incansable, viajera impenitente, el mundo de corazones, nubes, vestidos trapecios y michelines de Ágatha Ruiz de la Prada llena de prendas multicolor los armarios. En 1988 desfiló por primera vez en la Pasarela Cibeles -hoy Mercedes-Benz Fashion Week Madrid-, pero es habitual ver sus diseños en las pasarelas de Miami, México, Milán, Lima, Kioto e incluso Gambia. La diseñadora tiene tiendas propias en París, Bogotá, Portugal y Milán, que cerrará próximamente, como ya ha hecho con la tienda de Nueva York para centrarse en la Fundación Agatha Ruiz de la Prada, que puso en marcha en 2011, su principal "objetivo" para "preservar" su obra.

"Siempre me ha encantado el color de la bandera española", aseguraba ayer la diseñadora que siempre ha hecho desfiles "con mucho amarillo y rojo" y que ahora celebra que se haya perdido la resistencia a vestirlos. "Esto es buenísimo, la gente tiene que estar orgullosa de lo suyo", indicó. "No me gustan los nacionalismos y menos en estos momentos", señaló la modista que destacó la presencia que tuvo Barcelona como "capital de la moda" durante sus primeros años en la profesión. "Ahora es Madrid y eso ha ocurrido por tantas tonterías que se han hecho con el nacionalismo. Cataluña era la pera en el textil, pero ahora es mucho menos importante", señaló Agatha Ruiz de la Prada, hija de madrileño y de barcelonesa, quien espera que se arregle la situación en Cataluña.