La serie Black Mirror mostró en sus tres temporadas inventos tecnológicos capaces de cambiar la vida de las personas y ahora, a punto de estrenar la cuarta, su productora, Annabel Jones, reconoce que puede aterrorizar aún más al público porque los mundos que se muestran son "reconocibles".

"No hacemos ciencia ficción. No mostramos tecnología que la gente no pueda reconocer. Suelen ser extrapolaciones del mundo en el que estamos ahora. Se hace más terrorífico porque puedes reconocer esos mundos", explicó Jones a Efe, en una mesa redonda con los medios de comunicación.

El creador de la serie, Charlie Brooker, aseguró que, a la hora de escribir los guiones, no se basan en acontecimientos actuales como, por ejemplo, el Brexit o la presidencia de Donald Trump. "Algunas veces sí que coinciden el mundo real y la serie, o la actualidad parece estar relacionada con ella, pero la mayoría de las veces es una coincidencia. No solemos mirar los periódicos o las páginas tecnológicas para sacar nuestras ideas", añadió Brooker.

Black Mirror fue estrenada en 2011 y cuenta con tres temporadas, la primera y segunda de tres episodios cada una, y la tercera de seis capítulos. La cuarta llegará a la plataforma digital Netflix el próximo día 29 y estará compuesta por seis episodios, cuyos nombres serán Arkangel, USS Callister, Crocodile, Hang the Dj, Metalhead y Black Museum, este último rodado en parte en España.