El portavoz de En Marea, Luís Villares, defendió ayer la permanencia de Lidia Senra en su puesto de diputada en el Parlamento europeo, a pesar de rechazar el cuestionamiento de la seguridad de las vacunas seguridad de las vacunasplasmada por esta en unas preguntas en la Eurocámara en la que incluso deslizó que algunas "pueden llegar en algunos casos a provocar la muerte". "Que una persona en un concreto aspecto no sea representativa de la línea política [de En Marea] no significa que quede inhabilitada para esa representación", expuso ayer el exjuez.

Senra registró una pregunta a la Comisión Europea en la que ponía en duda la vacunación general de la población, defendida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). "¿No considera la Comisión Europea que ningún estado miembro debería obligar a la población a someterse a una práctica de riesgo y que la vacunación no debería ser obligatoria, dado que nadie ha podido demostrar su seguridad?", rezaba parte de la iniciativa.

La diputada accedió a su escaño como parte de la coalición Alternativa Galega de Esquerdas (AGE), coalición de Anova y Esquerda Unida precedente de En Marea. Estas tres formaciones se desmarcaron de la postura de Senra, cuya iniciativa provocó que saliese a la salud que hacía más de un año que ya no formaba parte del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica, que en España incorpora a Izquierda Plural (Anova e IU), Podemos y Bildu. EU aseguró que la salida se debió a la negativa de Senra a ceder parte de su salario al grupo. Este diario ha intentado contactar con la exsindicalista y ha requerido su versión de lo sucedido a un responsable de comunicación, pero no ha logrado todavía respuesta.

Villares, que se entrevistó con Senra hace dos semanas en Bruselas, reiteró ayer que no existe relación orgánica" entre esta y En Marea, que nació como partido instrumental el año pasado y confió en que mantenga su trabajo en defensa de los intereses gallegos. "Espero que lo pueda seguir haciendo", avaló el portavoz rupturista, que agradeció la "colaboración cordial" de Senra en su reciente visita a la sede del Parlamento Europeo.

El exjuez respondió a preguntas de la prensa sobre si Senra debía abandonar su puesto planteando que "si alguien debe dimitir" por asuntos vinculados a la sanidad son los dos cargos de la Xunta investigados por "homicidio imprudente" tras la muerte de ocho enfermos de hepatitis C. Se refería al exdirector de Asistencia Sanitaria del Sergas, Félix Rubial, y a la subdirectora de Farmacia, Carolina González-Criado. La justicia indaga si se produjo un retraso en la atención con fármacos de última generación por motivos económicos.

Villares, que exigió en rueda de prensa que la comisión parlamentaria sobre incendios amplíe su planteamiento e incorpore una reforma de la política forestal, añadió que son "responsables políticos y cómplices" en ese caso el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Sanidade, Jesús Almuíña.

A la polémica también se refirió el portavoz parlamentario del PP, Pedro Puy, que ciñó la exigencia de dimisión de Senra, "que fue desautorizada por su grupo", a su formación. "Esa decisión se la dejamos a ellos", dijo ayer el dirigente.