La jefa del Departamento de Educación de la ciudad de Nueva York, Carmen Fariña, de origen gallego, anunció ayer que abandonará su puesto en los próximos meses tras más de cuatro décadas en las que además fue maestra, directora y superintendente.

Fariña, hija de un sadense y cuya madre nació en Vilaboa (Pontevedra) lleva al frente del sistema de educación más grande del país desde hace cuatro años, cuando el entonces alcalde electo de Nueva York, Bill de Blasio, le pidió que reconsiderara su decisión de jubilarse. En una conferencia de prensa junto al alcalde, Fariña, de 74 años, aseguró que dejará el cargo cuando termine el presente curso académico con "la satisfacción de haber devuelto la dignidad a la profesión" de maestro.

"Estáis haciendo el mejor trabajo que puedes tener y la mejor oportunidad para ayudar a estudiantes que vienen a la escuela en busca de oportunidades para el futuro", dijo Fariña, que dirige un sistema de 1.800 escuelas con 1,1 millón de estudiantes.

De Blasio, por su parte, se refirió a Fariña como "una de las más eficaces jefas de Educación que hayamos tenido" y le atribuyó el alza en la tasa de graduación y el mejoramiento consistente de las puntuaciones en los exámenes estándares.

"El increíble trabajo que ha hecho tendrá impacto en los años por venir", destacó el alcalde, quien en las elecciones locales del pasado mes de noviembre revalidó su victoria en las urnas y estará otros cuatro años en el ayuntamiento.