La Consellería de Política Social prevé aprobar en el segundo semestre de 2018 el decreto que reformará la renta de integración social (Risga), de la que se beneficiaron en 2016 más de 15.000 gallegos en situación de exclusión y sin apenas ingresos y que consume cada vez un mayor volumen de recursos públicos (por encima de los 60 millones anuales). La principal novedad es que los beneficiarios de la Risga podrán compatibilizar la ayuda con un trabajo durante los seis primeros meses del contrato.

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