El número de personas con gripe fallecidas en la red de hospitales del Servizo Galego de Saúde (Sergas) en lo que va de temporada -iniciada el pasado 2 de octubre- se ha duplicado en la semana que concluyó el día 31 y asciende ya a diez. Todos los fallecidos tenían recomendada la vacuna antigripal, bien por edad o bien por otros factores de riesgo, pero solo tres estaban vacunados. Así se recoge en el último informe hecho público ayer por el Sergas, correspondiente a la última semana del año 2017. En dicho documento también se recoge que, a 4 de enero de 2018, permanecían ingresados en los hospitales gallegos 224 pacientes con gripe.

Desde el inicio de la temporada, ingresaron en centros hospitalarios 473 enfermos de gripe, de los que un 69% estaba aquejado de gripe B, que este año es la que más circula en toda España; ocho eran casos de gripe A y B, y el resto, enfermos con gripe A. El 88% de esos pacientes tenía indicada la vacuna pero, de ellos, más de la mitad no se habían vacunado, concretamente el 56%. Tanto los registros de vigilancia de gripe en centros de Atención Primaria como por parte del 061 confirman que la intensidad de la afección de gripe sigue en aumento, y actualmente se sitúa en un nivel medio, lo que confirma el inicio de la ola epidémica.