Los médicos del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) realizaron 256 trasplantes de órganos sólidos durante el pasado año, una veintena más que en 2016, lo que sitúa al centro coruñés como el cuarto el hospital de España con más operaciones de este tipo, según los datos hechos públicos ayer por el gerente del área sanitaria coruñesa, Luis Verde Remeseiro, y el coordinador de Trasplantes del Chuac, Fernando Mosteiro Pereira, que estuvieron acompañados en la presentación del balance anual de esas intervenciones por la enfermera de la Oficina de Trasplantes del Chuac Valentina Fernández y la jefa del Servicio de Cirugía Torácica y responsable del Programa de Trasplante de Pulmón, Mercedes de la Torre.

De los 256 trasplantes llevados a cabo por los facultativos del Chuac en el último ejercicio, 120 fueron de riñón -un total de 26, con órganos procedentes de un donante vivo-, 61 de hígado, 48 de pulmón, 26 de corazón y uno de páncreas. Cabe destacar, además, la realización de tres intervenciones dobles: dos trasplantes hepatorrenales y uno renopancreático. En trasplante pulmonar, el complejo hospitalario coruñés pulverizó su propio récord -la doctora de la Torre destacó el caso de un adolescente de 15 años al que se sometió a una cirugía cardíaca y a un trasplante de pulmón-, mientras que en la modalidad de trasplante renal de donante vivo, duplicó la tasa media estatal.

Lograr ese importante volumen de trasplantes no sería posible sin la solidaridad de la familias que donan los órganos de sus seres queridos fallecidos para salvar la vida de enfermos que no tienen otra alternativa, o de quienes hacen lo propio donando, en vida, un riñón. En este sentido, el complejo hospitalario coruñés registró un total de 64 donaciones en 2017, 37 de donante fallecido y 27 de donante vivo. Valentina Fernández López detalló que, en esta última modalidad, predomina la donación entre cónyuges, aunque también se dieron casos entre padres e hijos -y a la inversa-, entre hermanos, entre primos e, incluso, entre amigos.

Un dato especialmente relevante es que la negativa familiar a donar disminuyó significativamente en el área sanitaria de A Coruña, hasta siete puntos, y se sitúa en un 13,9%, por debajo de la media gallega, en un 21,5%. No obstante, Verde Remeseiro y Mosteiro uno de los objetivos del Chuac para este año es reducir todavía más esa tasa que, pese al descenso, se mantiene nueve décimas por encima de la media nacional.

Los responsables del Programa de Trasplantes del complejo hospitalario coruñés recordaron que la lista de espera en este tipo de intervenciones "depende de tener un donante", y especificaron que, el pasado 31 de diciembre, había cuatro pacientes a la espera de un corazón; nueve, de un pulmón; diez aguardaban por un hígado y 224, se encontraban a la espera de un riñón.