La edición de libros desciende progresivamente en España desde hace una década, pero no todos los idiomas se resienten por igual. Pese a que ahora se publican un 18,3% menos de obras y folletos que en 2007 -se pasó de casi 73.000 ejemplares anuales a los 59.567 de 2016, último año analizado- y que la producción bajó en todos los idiomas oficiales del país, el gallego y el euskera son los que salen peor parados. El número de libros en lengua gallega cayó un 33,6%, un descenso que solo es más acuciado en las obras en vasco (-34,6%), según los datos de Producción editorial de libros que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes a 2016. Eso sí, pese a la progresiva caída, el gallego es el tercer idioma oficial con más publicaciones: 976, solo por debajo de las 5.768 en catalán y las 44.844 en castellano.

Si hace diez años se superaba con creces el millar de libros y folletos -se consideran dentro de esa categoría las publicaciones de 5 a 48 páginas- en lengua gallega (1.472), ahora no se llega a mil títulos al año y la tendencia a la baja se mantiene ya que en los últimos doce meses analizados, la edición en gallego descendió un 12,8% al pasar de 1.120 libros a 976. El grueso de las publicaciones -siete de cada diez- se registran en Galicia, pero no es la única comunidad en la que se publican libros en este idioma. Tras las 751 obras publicadas en la comunidad gallega, la autonomía que registra más títulos en gallego es Madrid (137 en el último año), seguida de Cataluña (66), Andalucía (seis), Castilla y León y Comunidad Valenciana (ambos con tres), Aragón, País Vasco y Castilla-La Mancha (dos) y Asturias, Canarias y Extremadura, con uno cada una.

Casi la mitad de los títulos que se editan en lengua gallega se enmarcan en la categoría de literatura, historia y crítica literaria (453 en el año 2016) y en ellos, las obras dirigidas al público infantil y juvenil tienen un gran peso ya que suponen casi la mitad (194). También los libros de texto suponen uno de los grandes pilares de la edición en gallego (217 títulos en el último año analizado), al igual que las publicaciones oficiales (122). Pero el gallego es el idioma de cientos de obras de todo tipo y temática. Tras la literatura, las áreas con más presencia del gallego son las artes plásticas o fotografía (54 libros editados en este idioma), las biografías (53), la filología (51), la enseñanza o formación (49), las ciencias naturales (45) o la música y el teatro (45).

El idioma gallego es el cuarto con más publicaciones en el último año analizado, superado por el castellano, el catalán y el inglés (1.568), pero por encima de otras lenguas cooficiales como el euskera o el valenciano. Además, el gallego también es el tercer idioma oficial con más traducciones. En 2016 se tradujeron 57 obras gallegas a otra lengua, solo superada por los libros en castellano (960) y catalán (357).

La situación cambia cuando se analiza el número de publicaciones bilingües, es decir, libros o folletos editados en castellano y gallego. En 2016 solo hubo 84 títulos de este libro, la cifra más baja entre las lenguas cooficiales ya que hubo 269 libros bilingües en euskera y castellano, 266 en catalán y español y 140 en castellano y valenciano. Por categorías, de las 84 obras bilingües en gallego y castellano, 30 eran publicaciones de instituciones oficiales y por áreas temáticas, el arte y la fotografía concentraron 38 títulos de este tipo, la literatura y la historia otros 22 y después ya son obras sueltas de materias tan dispares como matemáticas, derecho o lingüística.

Al analizar la situación general del sector editorial, el gallego no es el único idioma en sufrir la crisis que vive esta industria. Si se analizan los datos de los libros publicados en cualquier idioma en España en la última década, solo las publicaciones en inglés experimentaron un repunte (de 1.300 a poco más de 1.500). Las obras en castellano siguen siendo mayoría (más de 44.800 en 2016), pero suponen un 21,7% menos que en 2007. La edición en euskera cayó un 34,6% y en catalán/valenciano bajó un 14,7%. La tendencia se mantiene ya que en último año cayeron un 2,6% las obras en castellano, un 17,8% en vasco y un 8,6% en catalán y valenciano.