«Lo encontré con los ojos abiertos, desvestido y enrollado con una chaqueta fina, de color azul», explicó Ana Montesinos, la vecina de Valencia que halló ayer a un bebé abandonado en el interior del portal del edificio donde reside.

Los hechos ocurrieron a las tres y cuarto de la tarde, en una finca del Camí Vell de Godella. Ana había subido a su casa quince minutos antes y al bajar de nuevo y salir del ascensor vio el bulto de ropa con el bebé en el hueco de la escalera. La joven vecina apenas tardó dos minutos en llamar a la Policía Nacional. Mientras esperaba cogió al niño en sus brazos.

Ana Montesinos explicó que el bebé debía de tener entre quince y veinte días. Durante el tiempo que pasó a la espera de la policía y los servicios médicos, el pequeño se dedicó a dormir, con total normalidad.

Sin el paradero de la madre

Una ambulancia del SAMU recogió al bebé y lo trasladó al hospital Clínico de Valencia donde ingresó para ser reconocido. Eran las cuatro de la tarde. A esa hora, los vecinos del patio donde apareció el niño todavía no salían de su asombro y comentaban que desconocían quien podría ser la madre.

El portal del edificio tenía la cerradura rota, lo que permitió al progenitor o progenitores abandonar al niño y huir casi de inmediato. Agentes de la Policía Nacional investigaban ayer el caso, a la búsqueda de la madre del bebé abandonado. El pequeño, ajeno a todo, descansaba en el hospital.