La declaración pericial puso fin ayer al juicio contra el exdirector comercial de Norprevisión, especializada en servicios de prevención y riesgos, acusado de un delito contra el mercado y los consumidores al cambiarse a otra empresa del sector y llevarse supuestamente la base de datos de los clientes, muchos de los cuales -300 según el fiscal- se dieron de baja en bloque en la primera empresa. Unas bajas que, asegura, se cubrieron mayoritariamente con la misma letra y se enviaron desde la misma oficina de Correos. La Fiscalía pide para F.C.I. 2 años y medio de prisión y 30.000 euros de indemnización, que la acusación particular eleva a 4 años y 100.000 euros. La defensa pide la absolución.

"El listado de la base de datos de Norprevisión estaba en el servidor de Previsonor, también asesorías y clientes", dijo el fiscal. Y es que en el registro de los ordenadores la Policía encontró 50 documentos y manuales creados por Norprevención a los que habían cambiado de anagrama por Previsonor. Desde modelos de bajas de clientes a dietas. El perito de la defensa cuestionó los metadatos de los archivos: "No son fiables al 100%, ni las fechas de creación o modificación". De hecho la defensa puso de manifiesto que algunos documentos habían sido modificados un año después de que la Policía interviniera el disco duro, y otros figuraban modificados antes de haberse creado.