Un grupo de víctimas de violencia de género, convocadas por la Asociación contra la violencia machista Ve-la luz, secundaron ayer un acto de protesta ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) en A Coruña para expresar su rechazo a crímenes como el de Moraña y pedir a las autoridades "medidas efectivas". El acto contó con la presencia de Margarita Dopico, la mujer que perdió a su hijo de catorce meses en 2010 en la localidad coruñesa de Paderne, después de que su progenitor prendiese fuego al coche en el que se encontraban ambos.

También estaba prevista la asistencia de Ruth Ortiz, la madre de los niños asesinados por su padre, José Bretón, que finalmente no compareció ante los medios de comunicación por encontrarse "afectada", según afirmó la presidenta del colectivo, Gloria Vázquez.

En la protesta, un grupo de mujeres ataviadas con camisetas negras con lemas contra la violencia de género colocaron numerosos pares de zapatos rojos ante las puertas del TSXG simbolizando a las mujeres víctimas del maltrato o fallecidas a manos de su pareja. Cinco de ellas tomaron posteriormente la palabra para condenar el doble parricidio cometido supuestamente este pasado viernes por el morañés David Oubel e instar a las autoridades a que "no se queden solo en palabras", indicó Margarita Dopico, que reclamó "medidas efectivas" contra la violencia de género.

A "los hombres envenenados", les ha instado "a que se lo piensen" antes de cometer hechos similares. "Esto es una agresión a todos los niños y a la sociedad entera", ha apostillado. En los mismos términos, se han pronunciado las demás participantes en el acto de protesta. Todas ellas expresaron su "repulsa" por el crimen de Moraña e incidieron en que los menores "son los que más sufren este tipo de violencia", añadido sobre los casos de violencia de género.