Las carreteras de la provincia de Pontevedra se cobraron ayer una nueva vida. Un joven de 23 años, I.M.M., murió en Redondela tras salirse de la vía con la motocicleta que pilotaba e impactar contra el quitamiedos. El accidente de tráfico se registró en la carretera N-550, en un tramo curvo en el que ya ocurrieron otros siniestros graves. El fallecido era vecino de esta localidad pontevedresa.

La alerta se recibió minutos antes de las cuatro y cuarto de la tarde. El accidente se produjo concretamente en el kilómetro 144,950 de la N-550, que une Porriño y Redondela. El joven, que pilotaba una motocicleta Yamaha de alta cilindrada y que circulaba en dirección a esta última localidad, se salió de la vía y colisionó contra una valla lateral. Los primeros en llegar fueron agentes de la Policía Local redondelana, que, tras dar la alerta al servicio de emergencias 112, de inmediato iniciaron las maniobras para tratar de reanimar a la víctima, que estaba gravemente herida.

Una vez llegó el 061 -que movilizó una ambulancia asistencial, otra medicalizada y a personal del PAC del municipio-, los sanitarios continuaron intentando reanimar al motorista, que finalmente falleció pese a los esfuerzos de policías y médicos.