Un hombre de 31 años de edad que cruzó con el semáforo en rojo por una calle de Ourense acabó en el calabozo por agredir supuestamente al agente de la Policía Local que se lo recriminó y además tendrá que desembolsar 200 euros de multa. Cuando cruzó la calle, un conductor tuvo que frenar bruscamente para evitar el atropello.