Un ciclista que circulaba ebrio y sin caso por la autovía do Salnés (donde están prohibidos tales vehículos) se quedará sin permiso de conducir hasta el año 2020. Además se le imponen 1.000 euros de multa por diversas infracciones y la retirada de todos los puntos. Al tratarse de un vehículo sin motor el caso no pasa al ámbito judicial.