El informe preliminar de la autopsia practicada a J.L.B.G., el vecino de A Coruña de 86 años fallecido el jueves tras una discusión con su compañero de habitación en la residencia de ancianos de Marín, apunta a que la muerte de este anciano se produjo "de forma accidental", según fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. El compañero de habitación de la víctima, A.G.A., vecino de Vigo de 87 años, fue detenido por la Policía Nacional y puesto a disposición del juzgado de guardia de Marín, que decretó su puesta en libertad aunque es investigado por este delito de homicidio imprudente a la espera de nuevas indagaciones. Desde el TSXG insisten en señalar que, con todas las cautelas al tratarse de una investigación todavía abierta, parece descartarse que la muerte se hubiera producido de forma dolosa.

El suceso se produjo en la noche del jueves cuando los dos octogenarios estaban en su habitación e iniciaron una discusión, al parecer, por un motivo poco trascendente. La discusión acabó derivando en una pelea en la que supuestamente se produjo un intercambio de golpes. En un momento dado, la víctima acabó cayendo al suelo y falleció. Fue el propio detenido, según indican desde la Consellería de Política Social, quien salió de la habitación alarmado y dio la alerta al personal del centro.

La Xunta confirma que la residencia actuó cumpliendo el protocolo establecido y en menos de 15 minutos un equipo sanitario del 061 estaba en el centro y certificaba el fallecimiento de la víctima. La investigación judicial continuará ahora para tratar de dilucidar la situación exacta en la que se produjo la muerta de esta persona, si por un golpe contra el suelo que se produjo al caerse o incluso por alguna indisposición causada por la tensión que le generó el verse en una pelea. Fuentes del TSXG también confirman que la víctima padecía "múltiples patologías previas" que complicaban su estado de salud.

Fractura de nariz

El detenido también tuvo que ser trasladado en la noche del jueves al hospital Montecelo de Pontevedra para ser tratado de una fractura de nariz, que sufrió por los golpes que recibió durante la discusión con su compañero de habitación. Al parecer, el fallecido llevaba ya años en la residencia, mientras que su compañero acababa de llegar recientemente al centro.

Desde la Xunta explicaron que se trató de "un incidente aislado" entre "dos personas autónomas y que tuvo lugar en la intimidad de la habitación que compartían, por lo que este desgraciado accidente no se pudo evitar de ninguna forma". También explicaron que, tras el paso a disposición judicial del detenido, será trasladado de centro residencial para "evitar que se produzcan situaciones desagradables por el malestar generado" tras este incidente.