La Audiencia Nacional ha declarado causa compleja la investigación abierta en 2011 por presunto blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico al clan Charlín. El objetivo es poder prolongar la instrucción al menos hasta el mes de julio de 2017, dado que la nueva legislación fija un plazo de seis meses para la instrucción de diligencias, prorrogables a 18 en caso de especial complejidad. Con un patrimonio embargado por valor de 12 millones de euros; cuentas bloqueadas en Suiza por importe de unos 3 millones de euros y con el patriarca, Manuel Charlín Gama, sus hijos y varias de sus nietas imputadas, la causa lleva cinco años oficialmente abierta y no hay todavía expectativas de ir a juicio.

Las diligencias apenas avanzan dado el retraso de las respuestas a las comisiones rogatorias enviadas a los distintos países por donde supuestamente se extendía la trama de blanqueo. El principal escollo radica en las inversiones realizadas en China por el clan Charlín. Concretamente una fábrica de transformación de productos del mar en la ciudad portuaria de Quindao, valorada en unos 3 millones de euros, que al parecer intentaban vender cuando fueron detenidos en la Repesca.

El país asiático guardó silencio y solicitó nueva documentación a los requerimientos de la Justicia española. Sin embargo hace unos meses, al fin, contestó. De momento sigue sin conocerse lo que dicen las autoridades de la República Popular China, ya que la traducción del documento todavía no se ha incorporado al sumario y se desconoce si se ha realizado.

El magistrado Fernando Andreu, titular del Juzgado Central de Instrucción 4 de la Audiencia Nacional que instruye la causa, dictó una providencia el pasado 16 de marzo en la que ordena hacer entrega de la copia de la traducción del escrito de las autoridades chinas al español a la Policía Nacional para que tanto agentes policiales como del Servicio de Vigilancia Aduanera emitieran el correspondiente informe. En la misma providencia recuerda que hay otros oficios, uno de ellos de 2014, pendientes de informe policial y urge su envío.

La operación Repesca contra el patrimonio oculto del clan Charlín se desarrolló en julio de 2010 con la detención de 14 personas, entre miembros de la familia Charlín, abogados y testaferros. Con 40 empresas bajo investigación afloró un patrimonio de unos 12 millones de euros que incluye 58 inmuebles, fundamentalmente casas y pisos de los detenidos en localidades como Padrón, Vilagarcía, Cambados, Vilanova o Pontevedra, así como una finca en un polígono industrial en Córdoba y una parcela en Redondela.

Manuel Charlín Gama acababa de salir en libertad dos días antes, tras pasar casi dos décadas encarcelado, cuando tuvo que volver a los juzgados de Vilagarcía imputado en la nueva causa de blanqueo. Pagó 30.000 euros de fianza, al igual que la mayoría de sus hijos para eludir su ingreso en prisión. En apenas dos horas reunieron la cantidad fijada por la juez. En los registros domiciliarios aparecieron ocultas en zulos hoyas, unos 200.000 euros en efectivo y varias escopetas.

Los investigadores llevaban tiempo documentándose respecto a la fábrica de productos del mar en China. Dos hijos de Manuel Charlín habían viajado al país asiático, según la documentación que obra en el sumario, para realizar diversas transacciones. La adquisición se habría realizado a través del considerado buque insignia del entramado financiero del clan, Orco Galaica. El negocio, no obstante, no debió salir todo lo bien que esperaban pues en las escuchas telefónicas se recoge que pretendían venderla bajando el precio que pedían inicialmente. Una de estas conversaciones implica al patriarca, dado que uno de sus hijos dice que deben consultarle. Por entonces Charlín Gama estaba en prisión.