El acusado de golpear a su vecina con el palo de una escoba al que fiscalía pide tres años de cárcel, José Luis R.G., se ha sentado este martes en el banquillo de los acusados de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra por unos hechos que tuvieron lugar en la tarde del 26 de septiembre de 2014 en Moaña.
El acusado, que solo ha respondido a las preguntas de su abogado, Franco Argibay, ha explicado que estaba en su casa viendo la televisión cuando escuchó fuera una fuerte discusión "con gritos e insultos" por lo que cogió su "videocámara" para "tener pruebas" y salió de su domicilio.
Según su versión de los hechos, cuando ya estaba en el jardín, fue la mujer --la denunciante-- la que se dirigió hacia él con el palo de una escoba, golpeándole en la cara. "Pim, pam, pum, contra mí por las escaleras para arriba", sostiene. Tras lo cual, la mujer se cayó al suelo por las escaleras y "perdió el sentido", según el relato del presunto agresor.
Por su parte, Engracia, la presunta víctima, ha explicado a los magistrados que ella y su vecino tienen una "mala relación". Así, ha descrito al acusado como un "mentiroso compulsivo, infantiloide y acomplejado" que "acosaba" a su hija.
"Yo me vi muerta, estoy viva de milagro", ha afirmado la presunta víctima. En su relato apunta que al regresar de su trabajo como profesora, "de repente", él se dirigió hacia ella gritándole: "Te voy a joder a ti y a tu hija, puta", mojándola con una manguera y golpeándola a continuación.
La fiscalía también considera que el acusado "con ánimo de menoscabar la integridad física" de Engracia, la golpeó en la cabeza con el palo de madera de una fregona, causándole traumatismo craneal leve y una herida incisa en el cuero cabelludo.
El representante del Ministerio Público indica que estos hechos son constitutivos de un delito de lesiones con instrumento peligroso por el que pide que se le imponga al acusado la pena de tres años de prisión y que indemnice a su vecina en la cantidad de 270 euros por las lesiones causadas.
Franco Argibay
Más allá del caso enjuiciado, en esta vista oral llamó la atención la presencia del abogado pontevedrés Manuel Franco Argibay, conocido por ser el asesor legal del narcotraficante fugado José Antonio Pouso Rivas, alias 'Pelopincho', en la operación 'Cormorán' de blanqueo de capitales y que estuvo fugado de la Justicia durante cinco años, entre 2006 y 2011.
Por aquellos hechos Franco Argibay fue condenado por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial en el año 2012 a tres años y tres meses de prisión. Más tarde la Sección Cuarta del tribunal provincial que le impuso cuatro años de prisión por estafar a dos clientes, entre los años 1996 y 2001, cuando ejercía de abogado.
