Un vecino de Vigo, de 37 años de edad, fue detenido a las puertas del colegio de su hijastro por un presunto delito de abusos y provocación sexual a menores. Se sospecha que el hombre se enteró de que estaba siendo investigado y acudió al centro escolar a las 11 de la mañana con la intención de llevarse al pequeño dentro del horario escolar. Agentes del Grupo de Menores de la Policía Autonómica de Vigo impidieron que recogiera al niño, de 12 años de edad, y lo arrestaron en una operación conjunta con el Servicio de Atención a la Familias (SAF) de la Comisaría Nacional de Vigo y con funcionarios del servicio de Menores de la Xunta, según informó ayer la Consellería de Presidencia.

Los hechos tuvieron lugar el pasado martes por la mañana. El niño acudió al colegio a primera hora de la mañana, como todos los días, pero apenas dos horas después su padrastro se presentó en el centro con la intención de llevárselo. En principio se desconoce si su intención era convencer al menor para que no contara nada a los agentes, o bien pretendía llevárselo fuera de Vigo.

Pero los agentes del SAF le seguían los pasos y lo tenían sometido a vigilancia, por lo que solicitaron apoyo de la Policía Autonómica y de la Xunta para arrestarlo. Agentes del Grupo de Menores le cortaron el paso al centro y procedieron a su arresto en el propio colegio del menor cuando pretendía recogerlo dentro del horario escolar.

Funcionarios del Servicio de Menores de la Xunta, que participaron en el operativo se hicieron cargo del niño para evitar su desamparo.

El detenido, padrastro del menor, era investigado por el SAF desde hace un tiempo por presuntos abusos sexuales. También es sospechoso de un delito de provocación con menores, relacionado con la difusión, venta o exhibición de material pornográfico a menores de edad. Precisamente al tratarse de una causa con menores y para proteger la identidad de las posibles víctimas apenas han trascendido datos sobre el caso.

Tanto la Xunta de Galicia como la Subdelgación del Gobierno se limitaron a informar del arresto y las causas que propiciaron la detención antes de lo que estaba previsto para salvaguardar al niño.

Hace apenas dos días el juez de guardia decretaba prisión provisional para otro vecino de Vigo, de 54 años de edad, también por presuntos abusos sexuales a un niño de 12 con el que tenía contacto por la red de mensajería de teléfono móvil WhatsApp, a través de la cual también le habría remitido archivos de carácter sexual.

Este hombre, que conocía a los padres del menor, tiene además a sus espaldas un largo historial de denuncias por hechos similares que comenzaron hace doce años, concretamente en 2004, entre ellas una presentada por su exmujer por supuestos tocamientos a la hija pequeña de ambos. Pero en todos estos anteriores casos, pese a haber sido objeto de investigación policial, nunca se llegó a demostrar su imputación por el miedo y vergüenza de las víctimas, así como por la corta edad que tenían éstas.

La comisaría de Vigo inició la investigación tras la denuncia presentada por un matrimonio en el mes de mayo, en la cual señalaban que su hijo de 12 años podría estar siendo víctima de abusos. Fue entonces cuando agentes del grupo del Servicio de Atención a la Familia (SAF) comenzaron las indagaciones, con un exhaustivo control de las redes sociales, aplicaciones y chats que usaba el menor, descubriendo una conversación con un adulto que aportó pistas y resultó clave en las pesquisas. Las investigaciones se centraron en ese individuo, descubriéndose en un estudio más pormenorizado del teléfono de la víctima el envío de archivos de carácter sexual.