Dos personas que se encontraban bajo seguimiento de la Guardia Civil fueron interceptados ayer en un control rutinario de tráfico para que el aviso de alto no los alentara a una fuga. Los agentes descubrieron en la A-52 un importante alijo de heroína, aproximadamente de 8,5 kilos de droga, una de las mayores incautaciones en Ourense en los últimos años.
Los arrestados, cuya identidad no trascendió ni tampoco si su participación se limitaba a la de transportistas, tienen domicilio en Ourense y uno de ellos es portugués. Ambos permanecían ayer en los calabozos de Xinzo.
