La Guardia Civil descarta que el accidente mortal del pasado sábado, en la A-6 a su paso por Montesalgueiro, en el Concello de Aranga, se produjese por un despiste del conductor. El joven kamikaze, que condujo durante quince minutos en sentido contrario por la autopista, primero hacia A Coruña y, después, hacia Madrid, era Christian Coego, tenía 21 años y era de Sobrado dos Monxes.

La Guardia Civil cree que se metió a propósito en dirección contraria, ya que era un hombre joven, al que consideraban en buenas condiciones y la zona está bien señalizada. El teniente jefe de tráfico de Ferrol, Francisco Javier Dopico, señaló ayer que la Guardia Civil estudia la posibilidad de que el joven pudiese conducir bajo los efectos de alguna sustancia o que se diese alguna "conducta anómala". Los investigadores contemplan posibilidades como que el joven estuviese participando en una apuesta o que se quisiese suicidar buscando el choque frontal con otro vehículo.

El accidente se saldó con la muerte de Christian Coego, con la del conductor del coche con el que chocó, un hombre de Ourense, y con la lesión grave de una mujer de 36 años.

Coego, según sus vecinos y sus redes sociales, era aficionado a montar a caballo, su padre tenía una empresa de aluminios en la que él trabajaba también, tenía una hermana menor y él jugaba al fútbol de centrocampista en el Club Atlético Sobrado Xuventude.