El profesor que impartía clases particulares en Almería y tomó imágenes y vídeos en los que aparecían varias de sus alumnas desnudas, aceptó ayer penas que suman cinco años y medio de prisión por un delito continuado de abuso sexual y otros seis delitos contra la integridad moral.

J.J.G.G., quien se dedicaba profesionalmente a dar clases particulares de Matemáticas y otras materias en una localidad de la comarca del Levante almeriense, mostró su conformidad con dichas penas después de que el fiscal rebajase su petición inicial de 32 años y tres meses de cárcel.

Fuentes judiciales informaron de que gracias a la reforma del Código Penal, los delitos de elaboración de material pornográfico infantil de los que era acusado han sido sustituidos en este caso por delitos contra la integridad moral.