Al menos 20 bomberos murieron ayer por el derrumbe de un edificio de 17 plantas en el centro de Teherán. Los efectivos quedaron atrapados bajo los escombros cuando intentaban apagar el incendio que se había propagado horas antes por el inmueble, que albergaba un conocido centro comercial y talleres de confección de ropa. El fuego causó además 70 heridos.