Un hombre de 43 años, natural de Baiona y vecino de Gondomar, falleció la pasada medianoche en Baiona a causa de un atragantamiento en plena Festa da Arribada. Al parecer, se encontraba comiendo un bocadillo en la céntrica calle Ventura Misa, en el casco histórico, cuando un trozo de chorizo le bloqueó el tracto respiratorio.

El personal médico del hospital de campaña habilitado por primera vez en la fiesta no pudo hacer nada por salvar la vida del baionés, que padecía patologías que complicaron la situación. Así lo confirman fuentes del operativo de seguridad desplegado en el puerto pesquero, integrado por el puesto de mando avanzado de la Axencia Galega de Emerxencias que coordina a un total de 200 agentes de la Guardia Civil y de policías locales de diversos ayuntamientos, así como efectivos de la Policía Autonómica, bomberos del Grupo de Emerxencias Supramunicipal Val Miñor y voluntarios de Protección Civil. El dispositivo cuenta asimismo con un puesto médico dotado con un autobús acondicionado como UVI móvil, con capacidad para atender a cuatro pacientes de forma simultánea, y dos ambulancias.

El fallecido fue trasladado a Vigo para practicarle la autopsia.