Una velada de boxeo celebrada este pasado sábado en el pabellón de Bouzas, en Vigo, acabó de la peor forma posible: con una bronca entre la delegada y un asistente a los combates. La delegada provincial de la Federación Gallega de Boxeo en el evento, Gemma Amoedo, denuncia que el exboxeador Roberto Domínguez -padre de un púgil que acababa de combatir y que estaba siendo atendido por el médico- la agredió con un "puñetazo" en el rostro después de que ella, según su versión, le "empujase" dándole "con la mano en la cara" de él para que permitiese a facultativo asistir al joven. Domínguez lo niega: "Ella fue quien me insultó y me agredió; yo solo le di un empujón para separarme".