La Guardia Civil detuvo al propietario de una empresa de Lalín, del sector del mueble, por un supuesto delito de estafa con casi 30 clientes afectados. El empresario habría obtenido de forma fraudulenta préstamos bancarios a nombre de sus compradores por un importe total de más de 200.000 euros.
La investigación arrancó tras la denuncia de un particular. Ya fueron localizadas 27 víctimas. El empresario gestionó y obtuvo más de 60 créditos por más de 200.000 euros. Valiéndose de conocimientos informáticos, tramitaba por internet la solicitud y la aprobación del préstamo, falsificando la firma digital del demandante.
