El atropello mortal de un ciclista, ocurrido a primera hora de la tarde de ayer en la PO-308, ha encendido las quejas y denuncias de los aficionados a la bicicleta por la peligrosidad de este y otros viales de la comarca. Jorge Vázquez Valcárcel, de 36 años y vecino de Pontevedra, murió poco después de las dos de la tarde en la parroquia de Samieira (Poio), cuando practicaba su deporte favorito en compañía de un amigo en la carretera que enlaza Pontevedra con Sanxenxo.

El ciclista falleció prácticamente en el acto al ser arrollado por un vehículo conducido por un hombre de 82 años que trataba de realizar un giro de cambio de sentido en la propia carretera, según explicó la Guardia Civil de Tráfico. Estas mismas fuentes apuntan que el conductor del turismo había adelantado instantes antes a los dos ciclistas y poco después paraba en el arcén para comenzar a realizar una maniobra de cambio de sentido.

Al hacer ese movimiento al volante no se percató de la presencia de las dos bicicletas, que fueron alcanzadas de lleno por el coche. El impacto fue mortal para Jorge Vázquez, mientras que su compañero apenas sufrió daños. La Guardia Civil de Tráfico realizó la prueba de alcoholemia al conductor octogenario, que arrojó un resultado negativo. Efectivos del 061 y del Servizo de Emerxencias de Sanxenxo trataron de reanimar a la víctima sin éxito.

Desde el colectivo ciclista Masa Crítica se indicó ayer que el fallecido, que residía en la calle Médico Ballina, era un gran aficionado al deporte de las dos ruedas y formaba parte de una peña ciclista denominada Ponte a Roda, con la que participaba en pruebas y salidas con asiduidad. Su próximo reto iba a ser el 4Picos, que pretendía afrontar a finales de este mes de abril.

Los colectivos de aficionados a la bicicleta, como Masa Crítica y Pedaladas, no descartan celebrar alguna concentración en recuerdo a Jorge Valdemoro, a la espera de lo que decidan sus compañeros de peña, consternados por el mortal accidente de ayer.