La Guardia Civil, en colaboración con la Agencia Tributaria, ha abierto 86 expedientes sancionadores a los titulares de embarcaciones de ambos lados de la ría de Arousa por el uso fraudulento de combustible subvencionado, en concreto, gasolina, material que es muy complicado de detectar, al no usarse un colorante para distinguirlos, como es el caso del gasóleo.

La operación, que se ha desarrollado en los últimos meses, arrancó casi de casualidad, cuando agentes de la Guardia Civil, que estaban realizando actuaciones encaminadas a la lucha contra el narcotráfico, se encontraron con que los tripulantes de varias embarcaciones a las que estaban siguiendo, desembarcaban en tierra varias garrafas llenas de combustible para trasladarlas a sus coches particulares.

A raíz de esta primera observación, los agentes de la Guardia Civil decidieron realizar una serie de controles operativos con un objetivo muy concreto, el de detectar el fraude que estaban realizando los titulares de las embarcaciones.

Con datos positivos en la mano, la operación decidió ampliarse mediante el control a las principales gasolineras de la ría de Arousa, tanto en la provincia de Pontevedra como en las que están situadas en la provincia de A Coruña.

Antes de proceder a abrir los expedientes sobre la defraudación, los agentes procedieron a una importante vigilancia de los defraudadores, además de iniciar un complejo estudio documental sobre los datos de los repostajes en las embarcaciones sobre las que recaía la sospecha. Tras el cruce de todos los datos obtenidos, litros repostados y capacidad de depósito, se realizó un cálculo de la cantidad de combustible que 86 embarcaciones habían repostado fuera de sus depósitos, deduciéndose una cantidad estimada de 158.000 litros tan solo en la ría de Arousa.

Esta cifra sería la mínima defraudada, ya que la Guardia Civil está convencida de que la cantidad que habría sido defraudada por los infractores es mucho más alta, pero resulta imposible de cuantificar con exactitud, debido a que se descartaron los repostajes inferiores o iguales a las capacidades de los depósitos autorizados en cada una de las embarcaciones autorizadas.

Los propietarios de las 86 embarcaciones localizadas en la pontevedresa ría de Arousa como infractoras recibirán, en breve, la correspondiente notificación por una infracción a la Ley de Impuestos Especiales, una sanción que acostumbra a suponer un desembolso económico importante para todos aquellos que hayan sido identificados por los agentes.