Un tanque de agua fue la tabla de salvación a la que se aferraron doce vecinos de la aldea de Nodeirinho para sobrevivir al pavoroso incendio que asola desde el sábado el centro de Portugal. Fue su propietaria, Maria do Céu Silva, quien sugirió esta manera de escapar de una muerte segura.

Según informó ayer el diario portugués Correio da Mañá, cuando el fuego acechaba las casas de esta familia y de sus vecinos, el marido de Maria do Céu les propuso huir con una furgoneta. La mujer, sin embargo, tuvo una idea mejor.

Siguiendo las indicaciones de la mujer, optaron por pasar toda la noche dentro del tanque de agua. En total, las 6 horas más angustiosas de sus vidas.