Las vacaciones de este gallego no terminaron como esperaba. Mejor dicho, ni llegaron a comenzar como estaba en sus planes. Julio Rodríguez González, un gallego residente en Panamá, voló hasta Perú, donde esperaba reunirse con su pareja que reside en Ourense.

Todo parecía marchar según lo previsto y ambos esperaban encontrarse para disfrutar de unas semanas juntos. Una vez en el aeropuerto de destino, la pareja de Julio pudo superar los controles sin problema. Sin embargo él se encontró con una desagradable sorpresa. Cuando se dirigió al control de pasaportes, le aseguraron que tenía una orden de búsqueda de la Interpol y le prohibieron la entrada al país.

Tras el impacto inicial, las pesquisas realizadas por la pareja y sus abogados echaron luz sobre los hechos. Julio comparte nombre y apellidos con otro hombre sobre el que pesan delitos por tráfico de drogas.

Ahora, de vuelta a Panamá, están dispuestos a realizar todas las reclamaciones y denuncias pertinentes para que este 'error' no pase sin pena ni gloria.