Con más de un millón de evacuados en toda Cuba, Irma continuaba ayer con vientos de 250 kilómetros por hora su avance por la costa norte de la isla, donde las provincias más orientales habían sufrido los primeros destrozos, mientras que la zona centro espera el embate del huracán en horas de la noche. Ante el "impacto inminente" de Irma, ya rebajado a categoría 4, once de las quince provincias de Cuba -unas tres cuartas partes de su territorio- se encuentran en estado de alarma y en ellas ya se han evacuado de sus hogares a más de un millón de personas.