Tras casi dos meses de pesquisas, la madre del bebé arrojado en un contenedor en Ourense ha sido localizada y acusada de intento de asesinato. Una joven de nacionalidad española de 29 años y vecina del barrio de O Vinteún, en Ourense, fue detenida ayer tras ser identificada como la progenitora del bebé abandonado el 17 de septiembre, apenas horas después de haber sido alumbrado. La mujer, que tiene otros tres hijos menores a su cargo y vive con su pareja, fue arrestada sobre las 13.00 horas de ayer en las inmediaciones de su domicilio, situado en la calle Río Sil, y a poco más de 80 metros de distancia del contenedor para residuos orgánicos en el que un indigente encontró al recién nacido.

Los resultados de ADN practicadas a la chica pudieron cotejarse con los restos biológicos que aparecieron junto al niño, y han permitido confirmar la identidad de la detenida, que tendría antecedentes penales por delitos de robo y hurto. Su localización ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana. Concretamente, por medio de una llamada de un vecino que consiguió centrar la atención de las pesquisas en esta sospechosa, que también podría ser consumidora ocasional de drogas.

"Se peinó mucho el barrio y se entrevistaron a numerosos testigos, pero las informaciones de este ciudadano fueron determinantes", confirmaban fuentes de una investigación calificada de "laboriosa". Las averiguaciones comenzaron revisando a todas las embarazadas de la ciudad registradas en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), ampliándose al resto de la provincia.

A la joven, que fue trasladada a la Comisaría de la Policía Nacional de As Lagoas, se le imputa la autoría de un delito de asesinato en grado de tentativa lo que, de demostrarse que fue ella la que arrojó al pequeño al contenedor, podría suponer una pena que puede ir desde los 15 a los 20 años de prisión. Está previsto que pase a disposición judicial, posiblemente, ya mañana viernes.

El bebé que fue localizado a las 16.00 horas del domingo 17 de septiembre en un contenedor de O Vinteún por un indigente que buscaba chatarra, nació con poco más de dos kilos de peso, lo que podía suponer riesgos para su salud debido a la inmadurez de sus pulmones y a la falta de grasa, que no le permitía regular de manera efectiva la temperatura exterior.

El pequeño vive en la actualidad con una familia de acogida desde que recibió el alta el pasado 25 de septiembre. El menor estará bajo tutela de la Xunta mientras no se lleve a cabo otra medida de protección definitiva, como la adopción o el acogimiento.

"Todavía queda pendiente alguna acción más, como algún registro en el domicilio de la madre", explicaban ayer fuentes de la Subdelegación del Gobierno acerca del estado de la investigación tras la detención de la joven madre. El proceso continúa abierto ya que otras personas podrían estar implicadas también en el abandono, pues todavía queda por esclarecer si fue la mujer la que, por su cuenta, echó al niño en la basura o si contó con colaboración para hacerlo. "Está claro que la persona que lo depositó allí sabía positivamente que el bebé iba a morir, porque metiéndolo en una bolsa y arrojándolo al contenedor le negaron el derecho de que alguien pudiera socorrerlo", defendía Roberto Castro, subdelegado del Gobierno en Ourense.