"Me salió del corazón que el último acto de mi hija en esta tierra se hiciera aquí, donde tan felices hemos sido, donde con tanta ilusión venía mi familia, donde tanto calor y hospitalidad hemos podido disfrutar a lo largo de nuestra vida". Éste ha sido el más desgarrado mensaje que el padre de Diana Quer, la joven madrileña de Las Rozas desaparecida en las fiestas patronales del Carmen el 22 de agosto, ha querido expresar a los cientos de vecinos que han llenado primero la marinera iglesia gótica de Santiago en A Pobra y después el atrio.

Una ceremonia que se prolongó durante dos horas y que fue un sentido homenaje a la víctima de El Chicle, Enrique Abuín, a quien nadie citó durante el largo acto de más de dos horas de duración, al que asistieron el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, acompañados por todos los alcaldes de la comarca.

Diana Quer "sonríe desde el cielo" afirmó un compungido padre que excusó la presencia "de Diana y Valeria" en este emotivo acto porque, explicó, "¡no saben el inmenso dolor que supone esta situación!, pero me han rogado encarecidamente que les diga que sus corazones están aquí, con todos ustedes".

Acompañado de Juan José Cortés, padre de Mariluz, la niña sevillana asesinada hace diez años y cuyo cuerpo apareció en el Guadalquivir, Juan Carlos Quer quiso agradecer el enorme apoyo y cariño "porque los 500 días de incertidumbre que vivimos fueron un poco más llevaderos, por la gente de bien, gracias a aquellos que cuidan de nosotros, los representantes de la Guardia Civil, los voluntarios, el cariño de todo el pueblo durante todo ese tiempo".

Esta espontánea y sincera exposición no le hizo olvidar ni un segundo a su hija, a cuyo retrato miró de frente más de una vez durante la ceremonia, y que obviamente le recordó el duro momento en que fue raptada cuando regresaba a su casa de las fiestas de A Pobra. Y recordó que Diana "vino a este mundo pesando un kilito, que se debatió entre la vida y la muerte durante los primeros seis meses de vida en una UVI pero que ha muerto luchando, ¡no les quepa la menor duda, con la mayor de las dignidades", para terminar asegurando que su hija le ha enseñado mucho "pero, sobre todo, me ha convertido en mejor persona".

Por ello pidió a la sociedad en general que estén atentos a las señales que emiten individuos como El Chicle que "semana tras semana nos están diciendo: tened cuidado con nosotros porque vamos a por nuestra próxima víctima". Justifica así la campaña en la plataforma Change.org por la que más de 2.050.000 personas respaldan con su rúbrica el mantenimiento de la prisión permanente revisable.

El alcalde de A Pobra, Xosé Lois Piñeiro, muy apenado, manifestó al abrir el homenaje a Diana Quer: "Este es el acto que nunca quisimos llegar a celebrar" . La campaña que hace nueve días han iniciado, entre otros, los padres de Diana y Mariluz, busca "protección de nuestros hijos, para que salgan a la calle sin que sean objeto de ataques de depredadores sexuales" pero que también extienden a otras personas "vulnerables".

La iniciativa persigue que no se derogue la pena de prisión permanente revisable como instan los grupos de la oposición en el Congreso al entender que vulnera el principio de reinserción que persigue la prisión.

Juan Carlos Quer asegura que es el primero que no defiende la cadena perpetua o que se prive a un detenido de sus derechos. "Pero también defiendo que la sociedad y los ciudadanos de bien de nuestro país tengan garantizados sus derechos", apuntó. En su propio nombre y también del padre de Mariluz, Quer insistió en que la sociedad debe procurar la total protección de los niños y otras personas vulnerables para que "puedan salir a la calle sin el temor de que un depredador sexual les prive de su derecho más fundamental, como es la vida".