Instituciones Penitenciarias traslada hoy a una cárcel de Madrid al narco cambadés José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, a petición de los responsables de la prisión pontevedresa de A Lama, a donde llegó el pasado 24 de febrero para ser juzgado por blanqueo de capitales junto a varios familiares en la Audiencia de Pontevedra.

El mismo día de su llegada Miñanco comunicó que empezaba una huelga de hambre para denunciar las vejaciones a las que se creía sometido. El juicio en Pontevedra se ha suspendido sin fecha tras la recusación de dos de los magistrados por parte de la defensa del cambadés, por lo que no hay motivo para prolongar su estancia en el penal pontevedrés.

Instituciones Penitenciarias, no obstante, le mantendrá el máximo grado penitenciario aplicado en la prisión de A Lama (Pontevedra) para extremar el control sobre uno de los mayores capos de la cocaína en Europa. Tras su detención en la denominada Operación Mito a principios de febrero al frente de una potente organización de narcotráfico, mientras disfrutaba del tercer grado penitenciario en Algeciras, se le intervinieron 6.000 euros entre la ropa que llevaba en la bolsa con la que entró en la prisión de Alcalá Meco.

Un dinero que se sospecha estaba destinado a comprar voluntades en la cárcel. Por eso Instituciones Penitenciarias extrema la vigilancia sobre el narco cambadés, al que le ha aplicado el primer grado, pese a ser un preso preventivo, a tenor de lo previsto en el artículo 10 de la Ley Orgánica Penitenciaria para internos "extremadamente peligrosos o manifiestamente inadaptados al régimen ordinario".