Carlos Inácio Pinto, el millonario portugués acusado de intentar matar a su mujer de 27 años en un hotel de Vigo en 2016, podría haber actuado por un motivo económico, para intentar cobrar supuestamente los 150.000 euros del seguro de vida que tenía firmado el matrimonio, según informó el diario El País.

El hombre, de 56 años, ya había sido condenado por fraude fiscal en Portugal en dos ocasiones. Una vez fue condenado a cuatro años de prisión efectiva por un delito de blanqueo de capitales y, en otra, por un delito fiscal de una cantidad que asciende aproximadamente a un millón de euros. Así se desprendería del auto de la juez en la que procesa al luso por un supuesto delito de tentativa de asesinato. Habría atacado a su mujer Eliza con una maza de cantero con la cabeza de acero, marca Bellota, causándole una fuerte herida en la cabeza. Según el auto, también trato de asfixiarla y la golpeó supuestamente en repetidas ocasiones. El suceso se produjo en un hotel de Vigo el 2 de mayo de hace dos años, lo que derivó en una orden de ingreso en prisión provisional.

En septiembre de 2017, Carlos Inácio Pinto escribió una carta desde la cárcel en la que insistía en su inocencia. "Estoy desencantando con la vida, estoy sufriendo bastante", declaró. Como hizo ante la juez, alega que fue su esposa Eliza la que lo atacó primero. La versión de la joven es que fue el portugués quien la golpeó por sorpresa en la cabeza cuando se echaba crema en el cuarto de baño. El juicio todavía no se ha celebrado.